Mientras el ascensor subía hasta nuestro piso estaba pensando en la maravillosa tarde que había pasado con Harry. Cuando entré en casa no había nadie. Entré en la cocina a comer algo ya que Harry no me había dado nada de su helado, fui a la nevera y allí había una nota de Araceli : "_______ me voy con Liam a dar una vuelta. Besos, Araceli". Cogí un vaso de leche, me puse el pijama y me fuí al salón a esperar a Araceli. A los pocos minutos llegó. Fué a su cuarto, seguramente iba a cambiarse. A los quince minutos salió y entró en el salón. Me estaba mirando con cara rara.
-¿Qué?.-le pregunté
- Nada...
- ¿Y por que me miras con esa cara?
-¿Yo? No te miro con cara rara...Y bueno, ¿no piensas contarme nada de tu cita?
- Uff...¿y por dónde quieres que empiece?
- Quiero saberlo todo!
Le conté todos los detalles de mi cita y ella como no, los de la suya.
-Bueno, ya te veo dentro de unos años con un mini Harry.- me dijo
- Y yo a ti con un mini Liam
- Idiota!
Me tiró un cogí y yo le tiré otro , empezamos una guerra de cojínes. Me encantaba pasar momentos como eses con ella,nada iba ha hacer que la dejara de querer, era como mi hermana. En ese momento me sonó el movil. Era un número español, pero no eran mis padres...
-¿Hola?.-dije
-________¿eres tu?
-Si, ¿quien es?
- Soy, Manuel, tu vecino
- Ah, Manuel, cuanto tiempo...¿en que puedo ayudarte?
- Tengo que darte una mala noticia...
-¿Que pasa?
-Tus padres han muerto..
En ese momento el teléfono se me cayó al suelo. No me lo podía creer, quería llorar pero las lágrimas no me salían. No sabía que hacer.
-¿Qué pasa'.-me preguntó Araceli.
- Ara, mis padres han uerto.
En ese momento sentí que perdía el sentido, sentí como mi cuerpo caía al suelo, no quería levantarme, cerré los ojos y me desmayé.
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