jueves, 12 de enero de 2012

Capítulo 30.

Cuando llegué a casa vi que Nathalie y Araceli estaban en el salón. Me dirigí allí y me senté en una butaca.
-¿Que tal la cita?.-me preguntó Araceli
-Muy bien, me voy a vivir con Harry!
-¿Que?.-dijo Nathalie
Le conté todo lo que había pasado y después fui a mi habitación a cambiarme. Al acabar volví al salón para saber que habían hecho las chicas.
-Bueno, ¿y vosotras que habéis hecho?
-Yo fui con Liam al cine y Nathalie se quedó en casa.
-¿Y que tal en el cine?
- Muy bien, aunque no me enteré mucho de la película.
Todas nos reímos, pero nuestras risas fueron interrumpidas por el teléfono de Araceli.Cogió el teléfono, era Liam, se fue a la cocina y al terminar de hablar volvió al salón.
-Chicas, mañana tenemos el cumpleaños de Zayn.
-Es verdad, no me acordaba...-dije
- El regalo ya se lo compraron los chicos de parte de todos.-dijo Araceli
-Menos mal...-dijo Nathalie
-Y mañana a las nueve y media los chicos nos vienen a buscar para ir a la fiesta.
-Vale.
Nos quedamos en el salón unas horas más, hasta que estábamos tan cansadas que nos moríamos con el sueño. A la mañana siguiente cuando me desperté Araceli y Nathalie ya estaban despiertas. Estaban desayunando, cuando me iba a sentar Nathalie me dió un grito.
-¿Que haces? Venga vístete que vamos a ver a Zayn!
-Pero déjame desayunar..
-No hay tiempo, sino Zayn ya estará despierto.
Me fui corriendo para mi habitación y al acabar de vestirme salimos corriendo. Cuando llegamos a casa de los chicos estaban todos despiertos, todos menos Zayn. Habíamos llegado a tiempo, menos mal...Todos entramos en la habitación de Zayn sin hacer ningún ruido. Louis llevaba en la mano el pastelito favorito de Zayn con dos velas, un uno y un nueve. Empezamos a cantarle el cumpleaños feliz y se despertó. Sopló las velas y todos nos tiramos encima de el para abrazarlo.Después todos nos fuímos para el salón, nos pasamos toda la mañana allí. Al acabar de comer nos despedimos de los chicos y nos fuimos para el piso. La mayor parte de la tarde la pasamos probándonos vestidos para la noche, no nos decidíamos por ninguno, pero a la hora acordada ya estábamos listas. Eran las nueve y media y los chicos llegaron puntuales, nos subimos al coche y nos dirigimos a un local en el que Zayn había montado la fiesta. Cuando llegamos todo estaba lleno de gente, muchas de las personas de acercaron a Zayn y lo felicitaron. Parecía que iba a ser una noche perfecta.

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